Preocupa el mal manejo de los medicamentos en el sector público

Desde hace un tiempo, varios centros asistenciales de todo el país viven un fenómeno preocupante: por deficiencias en el manejo de los medicamentos, muchos de estos productos se vencen sin ser usados. La situación, aseguran los especialistas, genera dos problemas fundamentales. Primero, la ineficiencia en el uso de los fondos, que no abundan y que terminan desperdiciados. Pero además, generan un problema porque su eliminación no puede hacerse sin las condiciones adecuadas, lo que obliga a nuevos gastos.

En el interior del país, este fenómeno se profundizó durante el último año, y en la mayoría de los casos se trata de los fármacos que llegan a través del plan Remediar. Una de las primeras provincia en admitir esta situación fue Entre Ríos. Allí, se estima que un 20 por ciento de los medicamentos que reciben bimestralmente los centros de salud locales a través de ese programa deben ser tirados. Lo paradójico, aseguran los profesionales, es que en dispensarios y hospitales siempre hay demandas de más medicinas.

Según varias denuncian realizadas, gran parte de este material termina almacenado de forma deficiente sin ningún control sobre su futuro. “Muchos de ellos, llevan años allí y nadie hace nada. Lo grave del caso no es que no se hayan quemado o ‘desnaturalizado’, en tiempo y forma, sino que se los haya dejado vencer porque sobraban en los dispensarios”, reconoció el secretario de Salud de la provincia, Pablo Basso.

Para evitar estas situación, el lunes pasado el gobierno de Entre Ríos anunció que unificaría las compras de medicamentos para reducir las pérdidas de los hospitales provinciales y centros de atención. Esta medida, se aclaró, no incluye a los fármacos llegados por el Remediar.

El ministro de Salud y Acción Social, Ángel Giano, explicó que el gobierno evalúa la posibilidad de aplicar un sistema de compras centralizadas de modo de ordenar el gasto hospitalario. De esta manera esperan bajar el fuerte déficit que se genera. Además adelantó que se comprarían medicamentos al laboratorio del gobierno de Santa Fe.

En tanto, en Tucumán esta semana se conoció que el Tribunal de Cuentas provincial investiga la presencia de productos defectuosos y no aptos para consumo en centros públicos locales. Según publicó ayer el diario La Gaceta, tras una investigación administrativa se detectó “la existencia de remedios en malas condiciones, que debían haber sido suministrados a pacientes oncológicos afiliados al Instituto de Previsión y Seguridad Social de Tucumán (IPSST)”.

Ante esa situación, el ente de contralor estatal inició un juicio de responsabilidad contra funcionarios del organismo previsional. Estos medicamentos fueron encontrados en el Centro de Calidad de Vida, Promoción y Prevención de la Salud, que depende del Ipsst. La pesquisa determinó la existencia de remedios vencidos, rotos o que perdieron la cadena de frío, entre otros.

Ante esta situación, el ministro de Salud tucumano, Pablo Yedlin, consideró conveniente que el Tribunal de Cuentas investigue el caso de los remedios vencidos en dependencias del Estado, pero manifestó que el hecho de que queden medicamentos sin distribuir no representa una irregularidad. Por el contrario, aseveró que esa es una situación que se da, inclusive, en los organismos internacionales de salud.

Pese a la justificación, Yedlin admitió que la cuestión está en proceso de investigación, y deslizó que las supuestas irregularidades no serían tales en el caso de los remedios encontrados en el organismo público cuando su fecha límite para el consumo ya había expirado. “Cuando uno tiene medicamentos stockeados (sic) para dar respuestas a la población, un porcentaje de estos medicamentos van a vencimiento: esto es normal en cualquier farmacia”, puntualizó.

 

FUENTE: https://miradaprofesional.com/ampliarpagina.php?e=a03c554b7c5eef036d0d7ec01a91093e&npag=1&id=1287

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